HOME > LA SAZÓN DE LA MORENA > Juquila, un rincón lleno de misticismo
Juquila, un rincón lleno de misticismo
27
SEP

Vive una fiesta de fe, sazón y tradición.


 

A 4 o 5 horas de la ciudad de Oaxaca, se divisa un lugar acogedor y entrañable: Juquila, cuyos hoteles se alistan para recibirte con los brazos abiertos. Una vez ahí, conocerás su principal atractivo, el templo que honra a la Virgen del mismo nombre, un santuario construido entre los siglos XVIII y XIX, cuya fachada muestra un hermoso altar dedicado a ella. Nos encontramos en la Plaza Central, sitio idóneo para disfrutar la gran variedad de artesanías típicas de la región, como petates, tenates, sopladores, mecapales, redes de ixtle o productos hechos de barro colorado.

En los costados de la plaza se encuentra el Palacio Municipal y el Mercado; en éste último tendrás que tomar una complicada decisión, elegir entre la gran diversidad de tradicionales platillos. A continuación mencionaremos algunos:

  • Enchiladas juquileñas: bañadas en mole rojo y rellenas de picadillo de puerco.
  • Flor de cuachepil: guisada con ajo, cebolla y tomate.
  • Frijoles negros con codillo de pata de puerco: preparados en olla de barro.
  • Barbacoa estilo Juquila.
  • Hisxumiles: carne de res previamente salada y secada al Sol para después poner a hervir con ejote.
  • Mole colorado: más dulce que picoso, se come con carne de cerdo, gallina o guajolote.
  • Tamales en sus distintas versiones: de chileajo, mole colorado o negro, chepil, mati de orejita y tamales dulces de elote y calabaza.

La lista podría seguir, así que para los amantes de la sazón, habrá que desayunar, comer y cenar en Juquila, para apenas intuir algunos de sus sabores característicos.

No olviden dejar un espacio para los postres, ya que en Juquila existe una rica variedad, desde las regañadas, los dulces de panela, de ciruela, plátano, durazno, garbanzo, betún, los revolcados de azúcar y canela, polvorones de manteca y podríamos continuar hasta empalagar al paladar más exigente.

Pasemos a las festividades; el 8 de diciembre tiene lugar la celebración más importante de la localidad, en honor a la Virgen de Juquila, a la que acuden peregrinos provenientes de localidades cercanas e incluso de estados de la república tan lejanos como Querétaro y Quintana Roo, pasando por Guerrero, Puebla, Veracruz, Tlaxcala, Chiapas y D.F. El pueblo se viste de colores, la iglesia se llena de flores, en el cielo aparecen los fuegos artificiales y por las calles podemos ver puestos con comida de la región y hasta juegos mecánicos.

Juquila es una fiesta donde la fe y la tradición se mezclan de una forma que en pocos lugares se puede observar. A pesar de la magnitud y fama del evento, la afluencia de visitantes es tal, que muchos prefieren visitar a la Virgen en otra época del año.